Tal vez te hayas dado cuenta de cómo cambia el comportamiento de tu hijo cuando su hermano(a) está presente. En algunos casos los niños presentan ciertas actitudes como de enojo, llorar con frecuencia, no querer compartir sus juguetes, etc. Si esto sigue ocurriendo con el paso de los años es porque el niño no superó los celos de la llegada de su nuevo hermano.
Los celos aparecen cuando el niño siente temor de perder el amor de sus padres y en algunas situaciones también puede llegar a sentirse desplazado por su hermano(a), donde siente que no se le toma lo suficientemente en cuenta.
Ayudar a los hijos a afrontar los celos, en vez de mostrar rigidez y castigarlos por sus actitudes les puede ayudar a mejorar su autoestima, brindando seguridad todo el tiempo. De esta manera el niño también puede aprender a valorarse y superar los celos, ya que de lo contrario esto puede ser algo que se quede con los años creando rivalidad entre hermanos y a que cuando sean adultos ni siquiera hablen entre ellos.
¿CÓMO PUEDO HACER PARA SOLUCIONAR LOS CELOS ENTRE MIS HIJOS?
- Celebrar los logros de ambos hijos: cuando se ría de alguna gracia del hijo menor, también se debe valorar el último logro del hermano mayor o del hermano que esté celoso, por más simple que sea.
- Enseñar a compartir: en vez de comprar algo para cada hijo, se puede comprar un juguete para un hijo, por ejemplo al hermano mayor y animarle de manera cálida a que comparta el juguete con el hermano menor. Proporcionarle experiencias gratificantes mientras comparten. Valorar y reforzar esta conducta cada vez que el niño logre hacerlo para que se sienta bien y sea él mismo quien busque realizar este tipo de experiencia.
- Evitar hacer comparaciones: entender que cada hijo es diferente y hacerle sentir que los queremos por lo que son, no porque son como a nosotros nos gustaría que fuesen. Además las comparaciones aumentan la rivalidad de los hijos.
- Evitar preferencias por uno de los hijos, ya sea porque se trata del hermano menor, por una enfermedad, etc., ya que esto hace que la relación entre ellos no sea buena.
- Mejorar el vínculo familiar, dedicando tiempo a los hijos como por ejemplo llevarlos al cine.
- Dar atención por igual: evitar dar más atención a un hijo, ya que esto refuerza la actitud de los celos.
- Animar realizar actividades juntas para que puedan unirse para competir contra los demás trabajando en equipo. Puede ser algún deporte o en los próximos vacacionales.
- Evitar castigar al niño frente a otras personas y su hermano, ya que esto solo puede incrementar la rivalidad entre ellos.
- Valorar los logros del niño, de esta forma el niño puede sentir que sus padres lo tienen en cuenta al igual que a su hermano y los celos son inútiles.
- Enseñar de manera cálida al niño la importancia de apoyarse unos a otros como hermanos que son y no como rivales.
Dra. Daniela Barzallo
Psicóloga Clínica
Neuropsicóloga infantil